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Valencia (31.10.03).- El Consell Valencià de Cultura, reunido en sesión ordinaria de pleno, en su sede del Palau del Forcalló, en la tarde del viernes 31 de octubre, ha debatido, entre otros puntos del orden del día, las propuestas de homenaje a Juan Gil-Albert, que fue el primer president del CVC y, del que se cumplen, en 2004, cien años de su nacimiento.

La sesión se inició con la aprobación del acta anterior y el informe del Presidente, Santiago Grisolía, en el que dio cuenta, entre otros asuntos, de la próxima visita, al CVC del President de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, con motivo de la apertura de curso 2003-2004 de la institución, así como de la entrega de la Memoria de 2002.

En su intervención, Grisolía manifestó su sorpresa ante la insensibilidad revelada por la falta de adhesiones en puntos de gran significación y trascendencia futura, citando como casos bien expresivos el hecho de que sólo el presidente del Gobierno, José Mª Aznar haya respondido con sensibilidad a los telegramas de llamadas de atención, cursados por el presidente del CVC, en los que se formulaba la criminal responsabilidad de los incendios provocados, que acabarán por poner en riesgo la supervivencia del planeta.

Por otra parte expresó su agradecimiento al Rector de la Universidad Miguel Hernández por haber dado una respuesta positiva a la petición del CVC que recomienda el emplazamiento de Centro Europeo de Fusión Nuclear en España.

De igual modo, informó acerca de la solicitud por parte de la Dirección General de Política Lingüística y Patrimonio Cultural, para que el CVC emita el informe preceptivo favorable para declarar B.I.C. el conjunto histórico de Alcira y de Culla.

El grupo de trabajo de impacto artístico en el paisaje, presentó, para su aprobación en el pleno, el informe sobre mobiliario urbano, que complementa el dictamen aprobado en enero de 2003, sobre elementos artísticos monumentales en carreteras y autovías.

Las conclusiones del mismo llevan al CVC a recomendar a la sociedad y a las administraciones públicas, un riguroso cuidado en la elección y ubicación de los elementos urbanos dado que acaban configurándose como fundamentales en el paisaje de la ciudad. Asimismo, instan a que la incorporación de mobiliario en los barrios históricos de los centros urbanos y rurales, sean los estrictamente necesarios y siempre acordes con el respeto del entorno.

A propuesta del Sr. Bellveser, el pleno decidió, por unanimidad, que el Consell Valencià de Cultura hiciera del año 2004, su “Año Juan Gil-Albert”, y, que la Comisión de Promoción estudie un programa de actividades en torno a la figura del insigne escritor.